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“Transflorestar - acto l”, primera película de Iara Rennó.

Invitada por Pedro Meira Monteiro, profesor de la Universidad de Princeton y miembro del colectivo curatorial Flip, Iara Rennó estrena su primera película, protagonizando la  dirección, guión y actuación, la película presenta nueva música, mezclada con poesía hablada y líneas documentales, también presenta edición y videoarte de Mary Gatis, dirección de arte de Alma Negrot y apariciones especiales de Curumin y Ed Trombone.

Nhe'éry (pronunciado nheeri) - tema de Flip 2021 - es lo que los guaraníes llaman Mata Atlántica, un nombre que revela la pluriversalidad de la selva. Según el cineasta y líder del pueblo guaraní Mbya, Carlos Papá, Nhe'éry significa “donde se bañan las almas”. Llevar mensajes a través de cadenas de palabras, vincular la literatura y hacer que sea esencial pensar en el mundo y las relaciones entre humanos y no humanos.  

“Transforestar” es la manifestación de la naturaleza en la profusión de sonidos, imágenes, palabras fertilizantes y alimentos. Un lugar donde las almas pueden bañarse y el espíritu puede expandirse hacia el todo. Es un bosque y está floreciendo.

En la narrativa, canciones y textos reverberan este concepto, ya sea acogiendo las fuerzas inmemoriales de los Orixás de los bosques, o en alianzas con Thalma de Freitas, Ava Rocha, Jaider Esbell, Tetê Espíndola y Alzira E. La trama encuentra inspiración en las historias. de Davi Kopenawa, en “La caída del cielo”; en los discursos de Ailton Krenak; en composiciones sobre fragmentos de textos de Eduardo Viveiros de Castro y en los ecos de Makunaimã en “Macunaíma”, de Mário de Andrade.

 

La película también incorpora la posibilidad de un “(M) otro mundo”, legado del filósofo burkinés Sobonfu Somé, y la perspectiva lingüística descolonial propuesta por Lélia González en “Améfrica”. Todo en un universo mítico y onírico habitado por Xapiri y Orisá, en el que las raíces de Yãkõana e Iroko se encuentran bajo el Océano Atlántico. 

O filme incorpora também a possibilidade de um “(M)otherworld”, legado da filósofa burquinabesa Sobonfu Somé, e a perspectiva decolonial linguística proposta por Lélia Gonzalez em “Améfrica”. Tudo num universo mítico e onírico habitado por Xapiri e Orisá, no qual as raízes da Yãkõana e do Iroko encontram-se sob o Oceano Atlântico. 

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